Bebidas azucaradas, un riesgo latente para la salud
El consumo de refrescos en el mundo se ha convertido en una normalidad para las personas, a pesar de los grandes daños a la salud que contrae su ingesta. Su consumo es uno de los detonantes de enfermedades como la diabetes o el sobrepeso.
Uno de los principales ingredientes de este producto es el azúcar. La cual se ha convertido en una de las nuevas adicciones del siglo XXI.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que una de las medidas más efectivas para disminuir su consumo es aumentar los impuestos a estos productos.
Se prevé que al fijar el costo de un refresco con al menos el 20 por ciento de incremento, baje el consumo y se orille a la población a beber otros líquidos como agua, jugos naturales o café. Estados Unidos, por ejemplo, ya muestra un 25 por ciento a la baja, en venta de dichas bebidas.
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La diabetes tipo 2, el sobrepeso y la obesidad en infantes y adultos, además de caries y complicaciones dentales, se relacionan con el consumo de refrescos.
De acuerdo con un estudio del Centro para la Ciencia de Interés Público (CSPI), el consumo per cápita se encuentra entre los más altos del mundo con 135 litros por persona en un año.
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