Se exhibirá el Jardín Escultórico del Museo de Arte Moderno en el Atrio de San Francisco

El Instituto Nacional de Bellas  Artes y Literatura (INBAL)  a través de la Coordinación Nacional de Artes Visuales y el Museo de Arte Moderno, en colaboración con el Programa Cultural Atrio de San Francisco de la Fundación del Centro Histórico de la Ciudad de México, invitan a la exposición El Jardín Escultórico del Museo de Arte Moderno en el Atrio de San Francisco.

Esta muestra surge como una colaboración interinstitucional para acercar al visitante una selección de la colección de escultura que se presenta de manera permanente en el Jardín Escultórico del Museo de Arte Moderno. 

En esta ocasión se muestran obras de los reconocidos artistas tales como Frank Kyle Black, Tosia Malamud, Geles Cabrera, Tomas Chávez Morado, Waldemar Sjölander, Herbert Hoffman, Rosa Castillo y Eugenio Kish, entre otros.

De orientación realista, las esculturas abarcan temas relacionados con la familia, la maternidad y el diálogo fraterno, como reflejo de las vivencias de quienes se aproximan a esta muestra.

Con el propósito de que la exposición sea accesibles a públicos diversos, se colocarán cédulas en Braille en todas las esculturas y se ofrecerán visitas guiadas dirigidas a grupos con discapacidad visual. La exposición estará abierta al público partir del 5 de diciembre de 2019 y permanecerá hasta marzo de 2020.

El Jardín Escultórico del Museo de Arte Moderno exhibe de manera permanente gran parte del acervo de esculturas modernas y contemporáneas del recinto, que coexisten en armonía con el paisaje del Bosque de Chapultepec. Entre los más de 15 mil metros cuadrados de áreas verdes que comprende el predio del MAM, puede disfrutarse un paseo artístico y admirar 73 obras de creadores mexicanos e internacionales en medio de más de medio millar de árboles.

La Fundación Centro Histórico ha generado programas para desarrollar y mejorar la vida en el Centro y permitir que las personas se acerquen a la cultura. Desde la recuperación del lugar histórico hasta la modificación del espacio del Atrio, se ha buscado a convertirlo en un espacio de descanso, un lugar de pausa en el bullicio del centro.